Día 18: Procura comprender
Nos gusta descubrir todo lo que podemos sobre las cosas que nos importan de verdad.¿Cuánto sabes de tu cónyuge?
Cuando un hombre intenta ganar el corazón de una mujer, la estudia. Descubre lo que le gusta, sus hábitos y sus pasatiempos; pero una vez que gana su corazón y se casa, suele dejar de descubrir cosas sobre ella. El misterio y el desafío de conocerla parecen menos intrigantes, y sus intereses comienzan a desviarse hacia otras áreas.
A menudo, también es cierto en el caso de las mujeres, quienes al principio admiran y respetan al hombre con el cual quieren estar. Luego del matrimonio, esos sentimientos comienzan a desvanecerse, a medida que la realidad revela que su “príncipe” es un hombre con imperfecciones y defectos. Sin embargo, tu cónyuge todavía tiene misterios escondidos para descubrir.
Comprender esto los ayudará a unirse más.
¿Sabes cuáles son sus mayores esperanzas y sueños?
¿Comprendes bien cómo prefiere dar y recibir amor?
¿Conoces sus mayores temores y por qué lucha con ellos?
Uno de los problemas que te impide tener una buena relación con tu cónyuge es que sencillamente no lo comprendes. Los gustos y las preferencias de tu cónyuge tienen sus razones. Cada matiz de su carácter tiene como trasfondo una historia. Si extrañas el nivel de intimidad que tenías con tu cónyuge, una buena manera de volver a ganar su corazón es comprometiéndote a conocerlo.
Estúdialo. Léelo como a un libro que intentas comprender. Considéralo un cofre que debe ser destrabado para hallar el tesoro.
Haz preguntas. El amor toma la iniciativa de comenzar las conversaciones. Tu cónyuge necesita saber que tu deseo de comprenderlo es auténtico, solamente así podrás lograr que se abra.
Escucha. El objetivo de comprender a tu cónyuge es escucharlo, no solo decirle lo que piensas. Aun si no es demasiado conversador.
El desafío de hoy: Prepara una cena especial en tu casa, solo para ustedes dos. Puede ser tan especial como quieras. Dedica este tiempo a conocer mejor a tu cónyuge, quizás en áreas de las cuales no han hablado casi nunca. Decide que sea una noche agradable para los dos.
(extraído del libro Desafío del Amor, Kendrick)