Día 29: La motivación del amor

En poco tiempo descubres que tu cónyuge no siempre motivará tu amor. Es más, muchas veces lo desmotivará. A menudo, parecerá difícil encontrar la inspiración para demostrárselo, y tal vez ni siquiera lo reciba cuando intentes expresárselo. Así es la naturaleza de la vida, incluso en matrimonios bastante saludables.

Piénsalo de la siguiente manera. Cuando eras niño, tus padres probablemente establecían reglas. Te ibas a dormir a cierta hora, tu habitación debía estar bastante limpia. Tenías que terminar la tarea escolar antes de poder jugar. Si eres como la mayoría, te apartabas de las reglas tanto como las obedecías. Y de no ser por el incentivo de la fuerza y las consecuencias, quizás no las hubiera obedecido demasiado.

Pero en algún momento de tu infancia, comenzaste a darte cuenta de que ya no solo tenías que responder a tus padres. Eso dejó de ser una batalla de voluntades entre tú y tu papá o mamá. Ahora debías responderle a Dios.

Sin embargo, resulta que la relación entre padres e hijos no es lo único que mejora cuando dejas que Dios sea tu motivación. Considera las siguientes áreas en las que agradar al Señor debería transformarse en tu objetivo:

El trabajo. <Todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres> (Colosenses 3:23).

El servicio. <Obedeced en todo a vuestros amos en la tierra, no para ser vistos, como los que quieren agradar a los hombres, sino con sinceridad de corazón, temiendo al Señor> (Colosenses 3:22).

Todo. Es necesario esforzarse en <todo lo que hagáis […], sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia. Es a Cristo el Señor a quien servís> (Colosenses 3:23-24).

Aun el matrimonio. <Mujeres, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor> (Colosenses 3:18). <Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia y se dio a sí mismo por ella> (Efesios 5:25).

Esto significa que el amor que demuestras en el matrimonio debería tener un objetivo principal: amar y honrar al Señor con devoción y sinceridad. Tu función como esposo o esposa adquiere una nueva dimensión y motivación  cuando la vez como un instrumento para expresar tu amor por Dios; cuando agradar al Señor se transforma en la razón detrás de aquello que haces.

Tal vez creas que u matrimonio o el amor por tu cónyuge sufrirán al transformar a Dios en el centro de tu concentración y tu deleite. Pero por el contrario, todo florecerá a medida que te acerques a Aquel que creó el matrimonio y que ama a tu cónyuge infinitamente más que tú.

Este cambio de visión y perspectiva es sumamente estratégico y crucial para un cristiano. Poder despertarte sabiendo que Dios es tu fuente y tu provisión (no solo para tus necesidades, sino también para las de tu cónyuge) cambia por completo el fundamento para interactuar con gracia con tu esposo o esposa. Esta persona imperfecta ya no decide cuánto amor mostrarás. Tu Dios perfecto en todo puede usar aun a una persona con fallas como tú para otorgar favor amoroso a otra.

El amor al cual solo lo motiva el deber no puede resistir demasiado. Y el amor al que únicamente lo motivan las condiciones favorables nunca puede estar seguro de recibir suficiente oxígeno como para seguir respirando. Pero el que se eleva como ofrenda a Dios nunca pierde su fundamento y puede sostenerse cuando todas las demás variables han perdido la capacidad de vigorizarnos.

Las personas a quienes no les importa tener un matrimonio mediocre pueden dejar el amor librado al azar y espera lo mejor. En cambio, si estás comprometido a darle a tu cónyuge el mejor amor que puedas, tienes que aspirar a la motivación inalterable del amor. El amor que tiene a Dios como su objetivo principal puede alcanzar alturas inimaginables. Cuando no sientas la motivación de hacerlo por tu cónyuge, hazlo por Dios.

El desafío de hoy: Antes de volver a ver a tu cónyuge hoy, ora por él y menciona sus necesidades. Sin importar si te resulta fácil o no, dile <te amo> y luego exprésale ese amor de alguna manera tangible. Vuelve a orar y agradécele a Dios por darte el privilegio de amar a esta persona especial… en forma incondicional, como Él los ama a los dos.

(extraído del libro Desafío del Amor, Kendrick)

 

anterior    siguiente

 

regresar

  • 14670716_1254507847903739_4991702056767930571_n
  • 14681781_1249055641782293_3664676815423115642_n
  • 15181504_1279917995362724_8582700220854722192_n
  • 15193529_1287459097941947_1171132903036658512_n
  • 15219393_1294269003927623_7471581414880844079_n
  • 15253662_1295968037091053_3251693544979778120_n
  • 15284065_1303074119713778_1366374529145533864_n
  • 15337437_1295974090423781_557581837517885994_n
  • 15350654_1295972063757317_188306624900626985_n
  • 15380500_1295974123757111_1106054619565534626_n
  • 15380515_1303065733047950_7459092195966201044_n
  • 15391010_1302996146388242_1410580766261585279_n
  • 15391228_1303069749714215_6438588373942287106_n
  • 15400468_1303070353047488_3713075061304479877_n
  • 15420958_1303070176380839_34398982516745238_n
  • 15589739_1309267682427755_5834509584377559278_n
  • 15589822_1319407751413748_7885335280380951559_n
  • 15590673_1319406208080569_2727770395621344642_n
  • 15621727_1319407298080460_1393056603264084883_n
  • 15672602_1319405574747299_2682468251868251693_n
  • 15825921_1332724036748786_602730574250923081_n
  • 875A4688
  • 875A4699
  • 875A4703
  • taller 05 pacifico

Created jtemplate.ru joomla modules